Pensadores Clásicos Siglo XVIII, XIX, XX

jueves, 31 de marzo de 2011

Revolucion Francesa

El inicio del fin de la era monarquica
El siglo XVIII trajo consigo una de los eventos mas relevantes y trascendentes en la historia de las formas de gobierno para la era moderna, en  Francia en 1789  ideologias de la ilustracion lideradas por Robespierre, Rousseau, y con bases en los pensamientos racionalsitas de Kant y politicos de Montesquieu , harian explosion de Europa hacia el mundo, la manera en que la sociedad se relacionaria con sus gobernantes cambiaría radicalmente.

Hasta 1789, la monarquía era la forma de gobierno que se ejercía con preponderancia en el mundo occidental, las monarquías después de la revolución sufrirían una transición hacia un nuevo modelo de gobierno: La Republica, la francesa seria la primera en surgir dadas las circunstancias.

La ilustracion fue una era de explosion en las ideas, del despertar de los hombres a la razon, de su llegada a la mayoria de edad como nos menciona Immanuel Kant en su texto ¿que es la ilustracion?, en ese momento llegaba a su fin esa era de oscuridad que habia reinado por tanto tiempo en occidente, la llamada edad media o al menos sus fundamentos ideologicos y politicos.

miércoles, 30 de marzo de 2011

¿Que es la ilustracion? de Immanuel Kant




¿Qué es Ilustración?
   
La ilustración es la salida del hombre  de su minoría de edad. El mismo es 
culpable de ella. La minoría de edad estriba en la incapacidad de servirse del  propio entendimiento, sin la dirección de otro. Uno mismo es culpable de esta 
minoría de edad cuando la causa de ella no yace en un defecto del entendimiento, sino en la falta de  decisión y ánimo para servirse con   independencia de él, sin la conducción de otro. ¡Sapere aude! ¡Ten valor de 
servirte de tu propio entendimiento! He aquí la divisa de la ilustración.  


La mayoría de los hombres, a pesar de que la naturaleza los ha librado desde 
tiempo atrás de conducción ajena (naturaliter maiorennes), permanecen con 
gusto bajo ella a lo largo de la vida, debido a la pereza y la cobardía. Por eso 
les es muy fácil a los otros erigirse en tutores. ¡Es tan cómodo ser menor de 
edad! Si tengo un libro que piensa  por mí, un pastor que reemplaza mi 
conciencia moral, un médico que juzga acerca de mi dieta, y así sucesivamente, 
no necesitaré del propio esfuerzo. Con sólo poder pagar, no tengo necesidad de 
pensar: otro tomará mi puesto en tan fastidiosa tarea. Como la mayoría de los 
hombres (y entre ellos la totalidad del bello sexo) tienen por muy peligroso el 
paso a la mayoría de edad, fuera de  ser penoso, aquellos tutores ya se han 
cuidado muy amablemente de tomar sobre sí semejante superintendencia. 
Después de haber atontado sus reses domesticadas, de modo que estas 
pacíficas criaturas no osan dar un solo paso fuera  de las andaderas en que 
están metidas, les mostraron el riesgo que las amenaza si intentan marchar 
solas. Lo cierto es que ese riesgo no es tan grande, pues después de algunas 
caídas habrían aprendido a caminar; pero los ejemplos de esos accidentes por 
lo común producen timidez y espanto, y alejan todo ulterior intento de rehacer 
semejante experiencia.  


Por tanto, a cada hombre individual le es difícil salir de la minoría de edad, casi 
convertida en naturaleza suya; inclusive, le ha cobrado afición. Por el momento 
es realmente incapaz de servirse del propio entendimiento, porque jamás se le 
deja hacer dicho ensayo. Los grillos que atan a la persistente minoría de edad 
están dados por reglamentos y fórmulas: instrumentos mecánicos de un uso 
racional, o mejor de un abuso de sus dotes naturales. Por no estar habituado a 
los movimientos libres, quien se desprenda de esos grillos quizá diera un 
inseguro salto por encima de alguna  estrechísima zanja. Por eso, sólo son 
pocos los que, por esfuerzo  del propio espíritu, logran salir de la minoría de 
edad y andar, sin embargo, con seguro paso. 











Kant, Immanuel. ¿Qué es la ilustración?: y otros escritos de ética, política y ilosofía de la historia / Madrid:Alianza Editorial,   2004.